Tuesday, July 16, 2013

Dexter Gordon - Dexter Blows Hot and Cool

Dootone, 1955 / Boplicity, 1994

Dexter Gordon es uno de los saxofonistas más atractivos y versátiles de la historia del jazz, un hombre con un estilo camaleónico en el que tienen cabida tanto las baladas más líricas como esas legendarias batallas instrumentales libradas sobre el escenario con instrumentistas de la calidad de Teddy Edwards o Wardell Gray y en las que Gordon solía salir victorioso. Por desgracia, su vida personal no se distinguió generalmente por ser demasiado ordenada y sus problemas con los narcóticos le valieron temporadas en la cárcel, que, sumadas a sus largas estadías en Europa, resultaron en una discografía menos extensa de lo que a los buenos aficionados nos hubiese gustado. Sin embargo, la mayor parte de las sesiones de grabación en las que participó y los varios conciertos suyos que se han preservado en cinta magnetofónica conforman un legado sonoro de innegable calidad.

Dexter Gordon
El disco que hoy nos ocupa, grabado en 1955 para Dootone Records, procede de una de las etapas menos prolíficas de la carrera de Gordon, y le tengo especial cariño debido a que fue el primer álbum suyo que escuché, ya hace muchos años, aprovechando que se encontraba en las generosamente surtidas estanterías de mi padre. Esta sesión, en la que está acompañado por un excelente cuarteto formado por Carl Perkins al piano (quien, obviamente, no debe ser confundido con el músico de rockabilly del mismo nombre), Jim Robinson a la trompeta, Leroy Vinnegar al contrabajo y Chuck Thompson a la batería, puso fin a un período de tiempo que Gordon pasó a la sombra a causa de su drogadicción. Se trata, sin duda, de una época de transición en su carrera, en la que ya se vislumbran algunos elementos propios de la serie de magníficos álbumes que grabaría para Blue Note en los años sesenta y que suelen ser considerados como el punto culminante de su producción discográfica. Pero en esta sesión descubrimos ya la potencia y la capacidad inventiva de sus solos, la claridad de su tono y el intimismo de sus baladas que caracterizan su estilo tan personal y reconocible.

El excelente y poco conocido pianista Carl Perkins
El título del LP, Dexter Blows Hot and Cool, describe su contenido a la perfección: en el repertorio salido de esta sesión se alternan temas propios de ritmo más acelerado, como "Silver Plated" y "Rhythm Mad", en los que Gordon da rienda suelta a su talento improvisatorio, con algunas baladas clásicas, como "Don't Worry about Me""I Should Care" y "Tenderly", que resultan vehículos perfectos para que Gordon saque a relucir esa irresistible faceta suavemente romántica que también forma parte de su estilo. En mi opinión, una de las joyas del disco es la versión de "Cry Me a River", una evocadora melodía de Arthur Hamilton que Julie London llevó al éxito a mediados de la década de los cincuenta. Gordon está perfectamente arropado por el resto del grupo, y en el disco brillan de manera especial el piano de Perkins y la trompeta de Robinson, un trompetista hoy injustamente olvidado. El buen trabajo de reedición llevado a cabo por Boplicity Records nos permite redescubrir un valioso disco en el que podemos ya observar que su etapa de esplendor hard bop no era, en 1955, más que una cuestión de tiempo.

No comments: